LA CARTA QUE SIGUE ME LA ENVIÓ UN BUEN AMIGO GALLEGO. Con su permiso la publico. Cuando el poder pide unidad, está pidiendo sumisión. Ha ocurrido siempre y ocurre ahora en Galicia con la política lingüística. Nuestra respuesta ha de ser siempre la misma: mejor división que sumisión. Galicia Seguir leyendo