La crisis del socialismo español es -al menos- triple. Es ideológica, económica e institucional. El socialismo español se ha vuelto rancio. Fue buen vino la cosecha Suresnes 1970 pero tanta «bodeguilla» lo ha avinagrado. La impresión general es que los dogmas del socialismo se derrumbaron en Europa en 1989 mientras se despedazaba el muro Seguir leyendo