Hoy ha venido a casa un mecánico del RACC a cambiar la rueda pinchada. !Fantástico! 10 minutos: un super gato desmontable, clik, clik y arriba; un taladro eléctrico que ha quitado los tornillos en un santiamén: ruckk, ruckkk y ya está. La conversación ha derivado hacia el Plan renove.
Precisamente hoy acaba el Plan Renove. Quería comprarle un twingo por 8.300 Euros a su suegro, y el suegro se ha quedado sin coche. Sin Plan vale más de 10.000 Euros.
– ¿Que pena, no? Quizás deberíamos de pedir otro Plan, le he dicho yo.
– Mire, -me contesta- esto es paternalismo. Aqui la gente no se espabila, lo paga todo el Estado. El Plan Renove, los cuatrocientos Euros; los 2.500 euros si tienes un hijo.
Y aquí se ha explayado.
– Yo estoy esperando un hijo el tercero, y es porque quiero tenerlo. Qué es esto de que el Estado te ayude por hacer una cosa que tú quieras-me decía en su mono multicolor.
-Pues no le falta a usted razón -le he contestado.
Me ha sorprendido el caballero. Es de los que piensan que el Estado tiene su función, pero no debe extralimitarse.
– Esto es el paternalismo, y la gente no se hace responsable -ha sentenciado.
En efecto es paternalismo democrático.
Antoni Bosch Carrera. Notario de Barcelona y profesor universitario.