Me recuerda este episodio el leído recientemente de Olof Palme. Muerto Franco, se presentó en defensa del PSOE en un Hotel de Madrid. En una conferencia, puso tibios al Gobierno de transición, e insto pronta democracia. No llegaron ni siquiera a expulsarle, sólo quejas diplomáticas. En aquel caso un primer ministro sueco y de izquierdas que llega a España, y clama por la democracia. Después llego la transición, y la democracia. En nuestro caso, el de Venezuela, estamos asistiendo a una operación de perpetuación en el poder. Un eurodiputado asiste a la oposición a Chávez (no era observador internacional). Por llamar a Chávez por su nombre, le cojen y le echan, sin más.
La cubanización de Venezuela es evidente. Para más pruebas lean el libro de De Aristegui (Contra Occidente). Nosotros con este gobierno socialista: paños calientes. No deja de ser paradójico que quién defiende la libertad no son OLOF PALME, WILLY BRANT, o MARIO SOARES. No, ahora defienden la libertad y la democracia en el mundo personas como LUIS HERRERO del Partido Popular. Fíjénse bien en el detalle: a un euro parlamentario le expulsan de malos modos por llamar dictador a Chávez. Lanza una opinión. Se expresa libremente y los policías -tal cual- le ponen de patitas en Brasil. Y encima, el Gobierno sordina. ¿Hubiera ocurrido esto si se tratara de un eurodiputado alemán, o del Reino Unido? ¡Se habría enterado Venezuela de lo que vale un peine! Pregunto, ¿dónde están Olof Palme, dónde Willy Brant, dónde Mario Soares para defender a Luis? ¿Dónde están las declaraciones del conceller Saura, de Moratinos? No están. ¡Y La izquierda encima lo critica con la boca pequeña! El tono general es mirar para otro lado, mientras se procura que la nota no irrite a Chávez. !Si esta es la defensa de la democracia parece que tenemos poca convicción en ella!
Antoni Bosch Carrera. Notario de Barcelona y profesor universitario.